10.9.07

Vuelta de las vacaciones (o no). Mientras tú jugabas con mi Janfri virtual, en casa hemos seguido trabajando durante lo que de momento ha sido el verano más caluroso de mi vida... y jugando con el Janfri real. Ahora parece que el calor empieza a remitir, por fin.
Aparte de trabajar, en agosto hemos hecho de guías turísticos de mi hermana y sus hijos por Granada. Intentamos comprar las entradas para la Alhambra por Internet con dos meses de antelación pero, por supuesto, no hubo manera. Primero salía un mensaje que decía que hasta la "renovación del convenio no se pueden vender entradas", y a primeros de julio, cuando en teoría volvieron a ponerse entradas a la venta, ya estaban agotadas. O se agotaron instantáneamente, o lo de esperar a la "renovación del convenio" no se refería a las agencias de viajes. Por suerte, Eva dio con la idea genial de comprar un bono turístico, que entre las varias atracciones granadinas que ofrece se incluye una visita a la Alhambra. En lugar de 10 euros pagamos 25 per persona, pero el caso es que valió la pena. Con el bono, además, tienes entradas al Parque de las Ciencias (una visita que se hace corta por muchas horas que pases allí y que recomiendo a todo el mundo que pase por Granada, no solo por las interesantísimas exhibiciones sino por lo fabuloso que es allí todo el personal), a la Catedral y la Capilla Real, al Monasterio de San Jerónimo, a la Cartuja y no sé dónde más porque con tanto calor tampoco pudimos salir mucho de casa. También incluye como diez viajes en autobús y un paseo en el bus turístico que por cierto es bastante decepcionante.
A todo esto, antes de que me andara por las ramas con toda esta publicidad gratuita del bono turístico de Granada, lo que me proponía era celebrar que por fin hemos roto la maldición de la Alhambra y recordarte que, para cada problema, hay una solución.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, si este ha sido tu verano mas caluroso es que llevas muy poquito en el sur, porque te puedo asegurar que ha sido de los mas fraquitos que recuerdo, salvo cuatro dias mal contados en que se podian freir huevos en la acera...
y no he tenido que dormir con el ventilador puesto como otros, que es lo bueno que tiene granada, que refresca de noche... si hasta me he tenido que arropar a veces. Vete preparando para cuando baje el airecillo de la sierra que sera de un dia para otro, que aqui pasamos del tirante al cuello vuelto en dos dias. Chau

Daniel Cortés dijo...

Hola, Sabe. Viviendo en un ático orientado al sur, ¡te aseguro que se pasan mejor los inviernos que los veranos! Al menos, mi primer verano aquí ha sido más duro que mi primer invierno. Ya tengo ganas de ver nevadas las cumbres de la Sierra.